No es secreto, los empleados de las empresas gubernamentales son difíciles de mantener motivados. Esto tiene que ver con varios factores, entre los que se encuentra el tamaño de la institución, el trabajo que se realiza y la cultura laboral que se había cultivado por muchas décadas dentro de las oficinas burocráticas. En este artículo te invitamos a plantear una nueva forma de motivar mediante distintos métodos incluyendo el salario, un bono... o incluso aportaciones de seguridad social como estrategia.
Afortunadamente hoy en día comienza a cambiar la cultura, y es precisamente este cambio de paradigma laboral, lo que hace que las técnicas de motivación sean, hoy más que nunca, indispensables en las empresas que pertenecen al gobierno, pues el trabajo de la administración pública se incremente día a con día.
1. El salario como herramienta motivacional
Una de las herramientas que podemos utilizar para la motivación de nuestros empleados es el salario.
Para poder hacer esto es necesario ver al salario de dos formas;
Primera forma de ver el salario
la primera es como la remuneración que obtendrá nuestro trabajador por realizar su trabajo. Para que este salario funcione como motivador tiene que cumplir con las necesidades básicas de nuestros trabajadores y un poco más, es decir, no solo debe de pagar lo mínimo para sobrevivir, sino que debe de otorgar un extra a cambio de los servicios recibidos, para que nuestros trabajadores inviertan en mejorar su estilo de vida.
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¿Por qué el salario funciona como un motivador?
El proporcionar un buen salario reduce la preocupación de los empleados en su día a día. Una buena remuneración ayuda a que se concentren en su trabajo, en mantenerlo y en hacerlo bien, en lugar de estar buscando fuentes alternas de ingreso para llegar al final de mes.
Esto también ayuda a disminuir las distracciones en el lugar de trabajo, pues ya no será mercado para la venta por catálogo, o actividades de este tipo.
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Segunda forma de ver el salario
La segunda forma en que debemos de observar el salario es como un extra que se puede otorgar a partir del desempeño de los trabajadores.
Es importante, en esta segunda aplicación del salario:
- No sea la aplicación principal, es decir que el salario a partir del desempeño no sea el mismo que el que utilizamos para remunerar a nuestros trabajadores, sino sea un bono extra, que se les otorga, además de lo que ganan habitualmente.
- No hacer de esta forma de motivación la única, pues, como fue demostrado por Karl Duncker, se puede caer en lo que se conoce como "fijación funcional”, es decir, que nuestros empleados estén más preocupados por ganar el bono que por hacer su trabajo, descuidando aquellas áreas que no influyen directamente en la recompensa.
2. Bonos de manera inteligente
Una vez tomado en cuenta lo anterior podemos otorgar bonos por el cumplimiento de objetivos específicos, pero siempre vigilando que no sean las mismas personas quienes se llevan dichos bonos, pues esto puede servir como desmotivador: “Para qué me esfuerzo, si el bono se lo va a llevar Fulanito, como siempre”.
Es importante que los empleados vean que hay la posibilidad de obtener dichos bonos, o prestaciones especiales, por hacer bien su trabajo, y que no son exclusivos de algunos trabajadores. También es importante que este tipo de motivación se dé de forma esporádica, para que los trabajadores lo vean como una oportunidad real, y no como algo que es la obligación de la empresa.
El salario puede ser un gran motivador, o todo lo contrario, por eso es importante que las empresas gubernamentales revisen sus políticas salariales y traten de cambiarla en medida de lo posible.
Un salario por arriba de lo justo ayuda a eliminar la necesidad de una segunda fuente de ingresos, motiva a las personas a cuidar su trabajo y vuelve a nuestros empleados leales para con las empresas gubernamental en la que estén laborando.
Los bonos, si se aplican correctamente, podrá ayudarnos a recompensar el esfuerzo de quienes le han echado más ganas a su trabajo, motivando lo que está bien hecho, e invitando a todos los que laboran dentro de la empresa burocrática, a realizar un esfuerzo extra por el bien de todos. Con la meta, de que al final tendremos una organización saludable.
¿Es la subcontratación una opción para mi empresa?
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